Amortiguador Trasero de Gas SYD para Altima L31

Aunque así lo parezca, la carrocería y las ruedas no se encuentran en contacto directo. La suspensión es un sistema que mantiene separadas ambas partes por medio de gomas y soportes. El amortiguador, la refacción de la que estamos por hablar, es la más famosa y la que de seguro ya conoces, pero ahora entenderás más sobre su uso en el coche y despejaremos dudas y acabaremos con mitos.

Como si viajaras en un colchón

Los amortiguadores son para que el carro vaya suave y que la carrocería se mantenga lejos del piso. Ahora bien, los amortiguadores no son los que mantienen suspendida la carrocería, eso lo hacen los resortes, lo que pasa es que como trabajan tan juntos la gente tiende a atribuirles a los amortiguadores la capacidad para levantar una carrocería.

Un amortiguador se instala para absorber la fuerza de los resortes y distribuirla, hablamos de la fuerza de los resortes. Sin un amortiguador, el resorte haría saltar a un auto cuando este se libere de golpe después de ser comprimido.

Los amortiguadores se unen con los resortes para “dominar” la enorme energía que pueden acumular, disipándola con cada tope o frenada brusca, absorbiendo los golpes que genera pasar por caminos irregulares.

¿Qué es un amortiguador?

Se conforma de un vástago y un cuerpo cilíndrico. El vástago cuenta con un pistón y sellos de presión que se introducen en el cuerpo que está lleno de fluido. Este último puede ser aceite o gas, dependiendo de la gama del amortiguador.

En la parte inferior del amortiguador existe una válvula que regula el paso de fluido hacia los lados del amortiguador. Esta parte es crucial cuando los amortiguadores entran en funcionamiento. Los soportes en el extremo inferior y la rosca en la parte superior del vástago son para unirse al coche por la parte de la suspensión y la carrocería, respectivamente.

Si se usa gas en lugar de aceite el resultado es más deportivo

Desde hace un tiempo, se creó una variante especial de amortiguadores para coches deportivos: a esta variante se le ha inyectado nitrógeno comprimido, lo que ocasiona una respuesta más rápida del amortiguador, es decir, cuando se comprime, vuelve a su posición original más rápido.

Un amortiguador con gas es la mejor opción para coches deportivos que viajan a alta velocidad y que toman vueltas pronunciadas, así se recupera la estabilidad mucho más rápido, el coche se ladea menos y se mantiene horizontal a pesar de las fuerzas de inercia ejercida sobre el coche. Pero hay que resaltar que el uso de gas disminuye la sensación de suavidad en el interior, lo que quiere decir que sentirás la suspensión más rígida y estática a diferencia de la suavidad que ofrece el aceite de los amortiguadores hidráulicos.

Los amortiguadores aguantan bastante, pero también se acaban

El fluido contenido en el interior de un amortiguador, ya sea aceite o gas, tiene un límite de durabilidad, cuando este se agota, el amortiguador pierde toda su capacidad para controlar al resorte y el peso del auto. Por su parte, los sellos y la válvula también tienen una resistencia que se acaba poco a poco, pues el calor generado en el interior es mayor de lo que podrías imaginar, lo cual deteriora los empaques.

Si está dañado, el amortiguador pasa a no disipar la fuerza del resorte, cosa que notarás al manejar un coche desbocado y que da fuertes saltos en los topes, el ruido de rechinidos será bastante molesto y las vueltas serán muy pronunciadas. ¿Has visto a un toro de rodeo en acción? Imagina que tu auto se convierte en uno de esos animales cuando los amortiguadores ya no sirven.

El recambio de amortiguadores deberás hacerlo máximo cada 3 años. No importa que no uses mucho el coche, los amortiguadores trabajan desde el momento que son colocados. Si usas tu coche muy seguido, deberás hacer una revisión cada año para determinar su funcionamiento.

Reemplaza tus amortiguadores a tiempo

Para instalar un amortiguador, primero debes retirar toda la pierna, nos referimos al amortiguador con el resorte y que se encuentra unida con la base del amortiguador. Para liberar el amortiguador, debes comprimir el resorte, para que puedas zafar el amortiguador, cosa que requiere de una herramienta especial. 

• Su instalación requiere el uso de gato hidráulico y un compresor de resortes.
• El precio es por cada amortiguador.
• No incluye base de amortiguador, tornillos de sujeción, goma de rebote ni cubrepolvo.