Juego de 4 Balatas de Cerámica Premium de Ruedas Delanteras Brembo para XTrail con Motor 2.5L

El sistema de frenos es simple en concepto, pero cómo funciona vaya que tiene su chiste, hablamos de presión hidráulica, válvulas y tubería, todo esto para que las pastillas de frenos hagan su chamba ¿Y cuál es? Hacer presión en los discos o como a mí me gusta llamarlo: “pellizcar los discos”.

Sabemos que evitan que te vayas de lleno contra un poste, alguna banqueta o el carro de enfrente.  Me atrevo a decir que seguramente tú usas más el pedal del freno que el del acelerador y con cada loco cruzándose la calle sin mirar el semáforo, pues más vale que seas de pie rápido.

Otros nombres para las balatas: zapatas de frenos, pastillas de frenos.

Analizando las balatas.

Se tratan de placas de metal en las cuales se ha colocado un pequeño bloque de material de fricción o pasta de frenos, es decir, dicho material está compuesto de tal forma que se erosionará con cada raspada o pellizcada a los discos, los cuales son la superficie de donde se van a sujetar las balatas.

Balatas hechas de cerámica, el frenado definitivo.

Las balatas regulares se fabrican con pasta “semimetálica”, que quiere decir que además de la pasta de fricción cuenta con viruta de metal con el fin de hacer más duraderas las balatas. Lo anterior tiene un precio, ya que el frenado será bueno, pero no excelente, cosa muy distinta con la cerámica, este material es el más adhesivo del mercado, lo que significa que apenas la balata toque el disco, el frenado ya se llevará a cabo y con solo una fracción de la fuerza requerida para las balatas convencionales, sumado a esto, las balatas de cerámica son las que menos calor acumulan.

El sobrecalentamiento en los frenos es normal, digo, se trata de fricción, es lógico que ocurra, lo malo es que el calor friega el ciclo de frenado, ya que los discos de frenos muy calientes se vuelven resbaladizos... ¿Entiendes lo peligroso de esto? Aparte, a las balatas les ocurre algo llamado “cristalización”, lo que provoca todavía más problemas para frenar. Por eso te decía que la cerámica es la mejor opción para el frenado, sobre todo si eres de pie pesado o te gusta frenar rápido.

Reemplaza tus balatas a tiempo.

Tratándose de balatas cerámicas lo más seguro es que cada 20,000 kilómetros tendrás que reemplazarlas, toma en cuenta que no todos usan el coche con la misma frecuencia. ¿Cómo te puedes dar cuenta que necesitas ya cambiar de balatas? Para tu fortuna, las mismas balatas te lo harán saber gracias a la pequeña lámina que tiene una de ellas, se podría decir que es un indicador, si esta laminita toca el disco, entonces ya no te queda mucha pasta para frenar y el ruido que hace esta pieza al rozar con un disco girando, créeme que lo vas a escuchar, así que alista pronto ese cambio para dejar de escucharlo.

• Para su instalación, requieres conocimientos intermedios en frenos.
• No incluyen seguros de balata.
• Al colocar balatas nuevas, escucharás un rechinido, es normal, sólo utiliza tu coche unos días a baja velocidad y poco a poco se irán asentando en los discos.