Puerta Delantera Lado Izquierdo Isaka para NP300 D23 Doble Cabina

El hecho de viajar seguros implica contar con seguridad, es decir que todos los que se encuentran dentro del auto se encuentren aislados por así decirlo, con esto nos referimos a que nadie del exterior, ajeno a los ocupantes logre ingresar o para evitar salir por las entradas en alguna vuelta pronunciada.

¿Como se puede definir a una puerta automotriz?

Una puerta es sencilla en concepto, pero es complicada en su construcción, se puede definir como una tapa en la carrocería, pero con muchísimos accesorios que la convierten en una pieza funcional de ingeniería. Nos referimos a chapas y manijas que le dan esa seguridad al conductor, la ergonomía de sus interiores para ofrecer comodidad a los pasajeros y la capacidad de impedir el paso de elementos como el ruido, el agua o la suciedad presentes en sus cristales, aislantes y hules.

El uso e implementación de una puerta responde principalmente a dos necesidades: La primera es para evitar salir disparados por la inercia del movimiento, es decir, en cualquier tipo de transporte, un requisito indispensable es que los ocupantes no puedan salir de la cabina, en un tren, elevador, teleférico o cualquier otro transporte que se te pueda ocurrir, está el factor de encierro, suena muy drástico, pero de hecho es muy necesario que nadie pueda salir por un auto de manera inconsciente.

La segunda razón ya es más familiar, el tema de la seguridad está presente todo el tiempo, incluso en nuestros hogares, colocamos puertas y rejas en nuestras ventanas por la misma razón que las puertas de un coche tienen seguros con llave, no deseamos que alguien desconocido acceda a nuestro auto, que mientras estemos fuera de casa, este se convertirá en nuestro hogar provisional.

Armado e instalación.

¡Uf! Es una chamba de varias horas, considerando que tienes que pasar todos los accesorios a la nueva pieza de lámina, no es que sea difícil de retirar, pero la cantidad de partes a trasladar de una puerta a otra si abruma a muchos, requieres de muchas herramientas de precisión y muchísima paciencia, sin olvidar claro que debes de conocer todas y cada una de las piezas para no equivocarte en su instalación.

Razones para tumbar una puerta.

Sólo podría haber dos motivos: oxidación o colisión. Con el primero nos referimos al herrumbre que se forma en las bisagras o esquinas inferiores, la oxidación vuelve muy frágil la pieza de metal y considerando que una puerta precisamente debe ser  fuerte pues no es una buena señal, esto ocurre cuando el auto queda en un estado de abandono o si algún liquido se derramó y permaneció estancado en las base o alguna hendidura escondida, cambiar una puerta por oxidación realmente es difícil, pues casi siempre tiene algún tipo de arreglo, pero a veces los casos son extremos.

El segundo motivo es mucho más familiar y común, un choque o golpe fuerte doblan la lámina y en casi todas las ocasiones ésta ya no puede volver a ser restaurada y aunque lo fuese, muchas veces el costo de reparación casi iguala al de simplemente comprar la pieza nueva.

La lámina no es suficiente.

La puerta será una pieza funcional de seguridad y confort sólo si cuenta con todos sus accesorios que le dan seguridad, ergonomía y hermetismo. Hablamos de las chapas, cristales, manijas, hules y aislantes. Todo en conjunto logra que nada del exterior pueda entrar sin la llave, que el ruido, el agua y el polvo se queden afuera y que el contacto con la puerta sea cómodo e incluso sirva como respaldo para el brazo gracias a sus vestiduras.

• Colocar una puerta requiere saber desmontar y colocar todos sus accesorios.
• La puerta está completamente vacía, no incluye ningún accesorio.
• La puerta está lista para ser pintada al color de tu auto.