Faro Principal con Fondo Cromado Derecho Diforza para NP300 D23

En los ojos esta la personalidad.

¿Sabes de donde viene la actitud en un coche? De sus faros, te puedes dar cuenta de eso de inmediato, es lo primero que vemos al conocer un coche, está claro que tiene su función, pero el hecho de que proyectan atributos como: elegancia, poder o alegría, son muestra de la inmensa estética que aportan al diseño total de un auto.

Anatomía de un faro.

Tenemos una carcasa y base del faro, en ella se acoplan las unidades de luz o focos, la carcasa tiene una superficie reflectora y cóncava que comúnmente se le conoce como: parábola y la cual funciona como un proyector de luz. Todo esto se corona con una mica de acrílico.

Sirven como un par extra de ojos cuando los tuyos no son suficientes. Por supuesto en la noche son cruciales para viajar, pero también aclaran el camino cuando la niebla se hace presente, las lluvias son densas o si un día nublados nos dificulta la visibilidad

Alumbrar tiene su chiste.

Sin importar la generación, la gama o el modelo, existen dos tipos básicos de iluminación con los que debe contar un auto dentro de sus faros:

Luces bajas: La más discreta en cuanto a intensidad, el foco proyecta la luz hacia el piso y un poco hacia el frente, la idea es visualizar el terreno cercano y no encandilar a los pilotos cercanos, esta es toda la iluminación que necesitas en ciudad, el alumbrado público y el hecho de que te encuentras rodeados de otros coches igualmente iluminados no requiere más luz de tu parte.

Luces altas: las utilizadas para viajes a carretera o en el campo, cuando no tenemos las ventajas de la ciudad debes echar mano de toda tu iluminación. Las luces altas, como su nombre indica proyecta la luz completamente en forma horizontal y apuntando al frente, todo lo que se encuentre en tu campo de visión será iluminado.

¿Cómo se pone un faro?

Pues mira, poner el faro no es la gran cosa, solo son como 4 o 6 tornillos, el problema es que como esta en un lugar estrecho tal vez tengas problemas con partes delanteras del motor o la facia, tienes que tener cuidado con el cableado y por último debes nivelar los faros, un proceso que consiste en regular la distancia e inclinación de los faros para que sus luces disparen ambos al mismo lugar.

Claro que los faros no son inmortales, también tienen sus debilidades que no son pocas, pero en general hay tres motivos para cambiar de faros.

La primera razón viene por un mal llamado: Opacamiento, el cual no es otra cosa que la mica poniéndose amarilla y áspera por el sol, el humo del escape de carros que tienes frente a ti y por la acumulación de polvo, todo esto se va incrustando y generado una especie de “cataratas” para los faros. Luego está el problema del robo indiscriminado, es muy triste ver que tu carro ha quedado ciego por culpa de algún ratonzuelo que camina en dos patas.

Por último, tenemos los impactos y golpes, no es secreto que un faro es todo menos resistente, cualquier empujoncito o recargón con otro carro las va a pulverizar, no hay remedio con esto, si se rompen se deben cambiar ya que, con la mica rota, el foco queda expuesto y a la menor gotita de agua, estalla.

• Su colocación implica retirar tolvas de motor y trabajar con cables.
• No incluye focos.
• Foco de alta y baja: H4.